Pequeños viajes, grandes experiencias.
Con los chicos de vacaciones se abre la oportunidad perfecta para escaparse unos días y disfrutar de destinos que combinan naturaleza, cultura y sabores únicos, sin salir demasiado lejos. En Salta hay múltiples opciones para viajes cortos que no requieren grandes traslados, ideales para familias y para recargar energías. Desde La Estación, te invitamos a animarte a una escapada y vivir el invierno como turista en tu propia región.
¿Hace cuánto no vas a Cafayate? A solo tres horas de la capital, Cafayate se mantiene como uno de los destinos favoritos del invierno salteño. Los paisajes son increíbles y, si vas con chicos, las paradas obligadas son la Garganta del Diablo, el Anfiteatro y los Castillos. También hay circuitos de trekking por la Quebrada de las Conchas.
Imperdible: pasear por la plaza, recorrer los paseos de artesanos y, si los chicos nos dejan, visitar alguna bodega.
¿Alguna vez fuiste al Tren a las Nubes?
Los salteños en general no vamos, pero es una oportunidad genial para una experiencia distinta. Lo bueno es que hay una tarifa especial para salteños. Además, San Antonio de los Cobres y su altiplano nevado ofrecen un paisaje de otro planeta.
¿Alguien dijo Jujuy?
San Salvador de Jujuy está a muy pocos kilómetros de la capital salteña y no solemos tenerlo en cuenta cuando pensamos en vacaciones, pero fui hace poco y descubrí un Jujuy renovado, digno de ser tenido en cuenta. Además, para quienes quieren un mix de cultura viva y color, la Quebrada de Humahuaca (Tilcara, Purmamarca, Humahuaca) es siempre un clásico. Ahora se sumó el Tren Solar que sale desde Volcán y llega a Tilcara.
Y una última recomendación de viaje cortito es Tafí del Valle en Tucumán. A solo unas pocas horas cruzando a la provincia vecina, Tafí del Valle es una excelente opción para combinar descanso, aire puro y una postal serrana que en invierno se viste de escarcha y paisajes hermosos. Las cabañas, los mercados artesanales y la buena comida completan la escapada.
Apostar por lo cercano es una forma de viajar con menos estrés, gastar menos y seguir descubriendo el inmenso encanto del norte argentino.
